¿PUEDO BAÑAR A MI GATO?

              

¿PUEDO BAÑAR A MI GATO?


Este artículo está dedicado a l@s valientes que se planteen bañar a su gato. Reconozco que yo nunca me he atrevido, salvo en gatos hospitalizados que han tenido alguna enfermedad y lo han necesitado para estar más higiénicos.
 Aunque puede que no lo parezca, una de las cosas que más me preguntan en las primeras consultas con los gatos es si pueden o deben bañarlo al igual que se hace con los perros. Es cierto que por regla general los gatos no son amantes de los baños pero eso no significa que todos los gatos tengan hidrofobia (miedo al agua) o que no sea necesario bañarlos. Con este artículo espero despejar vuestras dudas al respecto.

No sé si sabéis que los gatos dedican un 30-50% del tiempo que están despiertos a acicalarse. El fin de esto es eliminar el pelo que se desprende, las descamaciones, etc. y es muy importante ir controlando esto en nuestros gatos, porque es un indicativo de que nuestro gato está sano. Muchos gatos enfermos reducen su tiempo de acicalado y eso se traduce en la aparición de descamaciones (caspa) muy llamativas, pelo sin brillo, nudos, cambios en el color del pelo, etc.

El rechazo al agua no es innato en los gatos pero, como ya sabéis, suelen huir de aquello que no forma parte de sus costumbres o rutinas. Por increíble que os parezca, hay gatos a los que les gusta el agua, de hecho son animales que llegan a pescar, y no dudan en meter la patita en el acuario para coger un pez o en el cuenco del agua para jugar o beber. Seguro que habéis visto algún gato al que le encanta beber agua de un grifo abierto, y hasta algunos se meten en la ducha. Además, hay razas como el Siberiano, el Maine Coon o el Bosque de Noruega a las que les suele gustar bastante el agua.

¿Cómo y cuando podemos empezar a bañar a nuestro gato?

Si tenéis un gatito y queréis introducirlo en el mundo de la ducha, os recomiendo que empecéis con los baños a partir de los 2 meses y medio de edad. Es importante que lo hagáis en un ambiente poco estresante, podéis utilizar mejor el lavabo antes que la bañera para mayor comodidad. Siempre hay que utilizar agua tibia y, en vez de sumergir al gato en el agua, es preferible apoyarlo en el lavabo e ir echando el agua encima con un cazo. Debéis evitar la zona de la cabeza para que no entre agua o jabón en los ojos y los oídos y así evitaréis conjuntivitis y otitis.

No os digo que lo hagáis o no, pero desde el punto de vista veterinario, sí os recomiendo acostumbrar a vuestro gato a los baños porque hay muchas situaciones que se nos presentan en la consulta que requieren de baños como parte del tratamiento. Por ejemplo, en el caso de ectoparásitos (pulgas, garrapatas, piojos), de la dermatofitosis o tiña felina, dermatitis húmedas, etc. También se aconseja bañar a los gatos outdoor (que viven o salen al exterior)  y que pasan algún rato del día en el interior de la casa encima de nuestra cama o del sofá.

¿Qué champú utilizo para bañar al gato? ¿Puedo usar uno de bebé?

Son también preguntas bastante frecuentes en la consulta. Parece bastante evidente pero un gato no es un bebé, por eso mismo no pueden compartir el champú. El pH de la piel del gato está en torno a 7-7.5 mientras que el de los humanos está en 5, por muy suave que sea el champú que quieras utilizar, podría ser irritante para la piel del gato. Hay líneas de cosmética (champús y perfumes) específicas para los gatos y son las que deberíais utilizar.

Por último y muy importante hay que señalar que, si a vuestro gato no le gusta el agua ni los baños, no tenéis que forzar para nada esa situación porque puede ser contraproducente. Si insistís en bañarlos sólo vais a conseguir que vuestro gato lo pase mal, se estrese y que vuestros brazos acaben llenos de arañazos y el baño lleno de agua. Como en la mayoría de asuntos relacionados con los gatos hay que tener mucha paciencia y entender que son animales fascinantes pero también muy especiales en cuanto a su comportamiento y relación con el ser humano.